NECESITO

Necesito la piel de una mujer....

Hace años que no tengo el ardor

de una mujer encendida en mis años,..

hundirme en ella, sentir su calor...

Fundirme en sus labios ardientes,

sentir que la vida está, que no termina

aún después del olvido de la materia,

aún cuando el alma cae vencida...

Ya no están las caricias del ayer...

ya no están los suspiros de este hoy...

ya no hay nada el camino árido,

solo la noche acompaña mi dolor.

Siente, palpita, arde mi sangre

cuando recuerdo sus grandes ojos fijos,

muero por ella cada mañana,

muero por ella y no tengo ningún suspiros...

Dame vida, aunque sea solo un instante,

donde pueda encontrar otro alba.

La soledad es triste, aterradora.

¡Cómo quisiera ahora, sentirla en mi alma!.

Autor: Luis Alberto Maestri

 

TU ALMA

Es la quietud de tu alma

la que me ofrece descanso.

Son tus ojos que, cuando miran,

iluminan de luz, mis pasos.

Es la ternura de tus caricias

la que me brinda fortaleza, 

es fuego de tus labios

que a mi entrañas quema.

Son tus manos ente las mías

que me conducen al  alba,

allí siempre me envuelve

la calidez de tu alma...

Hay un camino que juntos

debemos recorrer en la vida.

Es un camino a veces florido,

otras con muchas espinas...

Pero cuando está firme el sentimiento

los fracasos no hablan de adiós,

sino que son siempre los sueños

que elevan permanentemente al amor.

Autor: Luis Alberto Maestri

 

PRESENCIA

¿Estás ahí?...siento tu presencia.

Ella  inunda todos los instantes.

El día se iluminacon el sol.

La caricia se siente como antes.

El mundo sigue creciendo,

todo es posible cuando hay amor.

La noche calla, palpita.

Ahí, nace vibrante una canción.

Los suspiros llenan profundo

la piel que, ardiente,

vibra ante el recuerdo

de una entrega para siempre.

La vida es una totalidad

cuando acuna al corazón,

en unas existencia única

donde triunfa el gran amor.

Autor: Luis Alberto Maestri

 

TIMONEAR

Se dormirán las estrellas

en el inmenso azul del cielo.

La luna no se encontrará

en algún alba con el sol.

El corcel con los sueños

comienza a cabalgar

por el infinito de los años

donde caen las fuerzas.

Entonces, el cincel del corzón

comienza a labrar otro destino;

es necesario transformar la tempestad

en una callada mollina...

El clavicordio desanda sus cuerdas

que se templan en el silencio.

Aparece una musa inquietante;

nace eterna otra melodía.

Contumaz es el hombre,

desea conocer otras tierras,

a veces vuela su imaginación,

pero siempre hacia el amor llega.

El jardín de la vida vuelve

a inundar con su aroma el día,

ya no hay noches sin estrellas,

ya no hay dolor en el alba.

Se enciende la luz intensa

en una mirada que llega suave.

No hay que dejar la nave a la deriva.

El timón no debe soltarse jamás.

Autor: Luis Alberto Maestri

 

SILENCIO

¡Calla mi corazón¡

Ya no estás conmigo,

partiste, no quisiste estar

en este mundo sin sentido.

Yo, aquí solo, ¿donde buscarte?

Ya no quedan sueños en el altar.

Sentir la soledad y el dolor.

¡Es algo que nunca se puede callar!.

Es triste no tenerte en mis brazos

como todos los días que te conocí.

Es mi hoy estar en la soledad.

Pensar que fui inmensamente feliz.

Acá esoy, no podré jamás

sentirte y tenerte a mi lado.

La noche cae y la oscuridad inunda,

aunque sigo de ti, enamordo...

Autor: Luis Alberto Maestri

 

UN  POEMA

Pensé que un poema

terminaba su vida

junto  a su autor:

!No, ahí la muerte esquiva!

Por eso cuando la pluma

se desliza en el papel,

recuerda que no es un instante,

es eternidad, es siempre ser.

Serán sueños del ayer, 

ilusión de este hoy,

música que inunda

de nostalgia  el corazón.

El amor florece eterno

en los días que inundaron

instantes que jamás se olvidan

en un ser enamorado.

Entonces, una vez escrito,

deja que hable en el futuro

de un sentimiento único,

porque fue, es y será puro.

Autor: Luis Alberto Maestri

 

TOMA MI MANO

Quedan quietos los recuerdos

en el umbral de una melodía.

Melodía que en el silencio

sus notas, como el rocío, caían.

Invisible esencia el espíritu

que busca incansable la idea

de llevar a esta realidad 

una alforja de virtudes repleta.

Difícil misión en este hoy

que tiene un mañana incierto.

Muchas cosas se perdieron en el ayer

en el frío cortante del invierno.

Invierno que congeló el alma

a la soledad del desierto.

Ahí la arena te cubre los ojos

para llevarte a su infierno.

Mira hermano, aquí está la vida,

llénala de incesante búsqueda.

No dejes por ahí perdido,

que tus sueños no mueran en la basura.

Toma mi mano, caminemos,

no te detengas, atrapa al sol,

será quien ilumine la senda

que te guiará al verdadero amor.

Autor: Luis Alberto Maestri